Depósitos de carbono en escenario ajustado según área de conservacióna/. 1986 y 2019 (𝒕𝑪𝑶𝟐 − 𝒆 𝒉𝒂−)
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a/Para efectos de visualización, los resultados se agrupan espacialmente en hexágonos de igual tamaño, donde cada hexágono abarca 586,6 hectáreas. Sin embargo, todos los procesamientos se llevan a cabo mediante el análisis espacial píxel a píxel. Fuente: Fuente: Durán Monge, con datos de Minae (2019b) y Obando et al. (2021).
Entre 1986 y 2019 los depósitos forestales de carbono en el ámbito nacional alcanzaron un valor promedio anual de 1.055 millones de toneladas de CO2 equivalente (tCO2 e), y muestran una tendencia de relativa estabilidad a lo largo de ese período. Este comportamiento es resultado de una combinación de pérdidas y ganancias en el stock de carbono en el tiempo y no se ha distribuido de manera homogénea en el territorio.
Las áreas de conservación La Amistad Caribe (ACLAC) y Central (ACC) acumulan la mayor parte de los depósitos forestales de carbono y el potencial de mitigación del cambio climático en el ámbito forestal, con valores promedio entre los años 1986 y 2019 de 20,7% y 17,9% respectivamente.
Las áreas Huetar Norte (ACAHN), La Amistad Pacífico (ACLAP), Tempisque (ACT) y Osa (ACOSA) muestran valores intermedios de depósitos forestales de carbono que oscilan entre el 13,2% y 8,8% del total nacional a lo largo del período de estudio.
Mientras cuatro zonas registran los niveles más bajos (en promedio 4,8%) y con menor potencial de mitigación del cambio climático: Tortuguero (ACTO), Arenal Tempisque (ACAT), Guanacaste (ACG) y Pacífico Central (Acopac).
Este patrón está claramente asociado con la distribución de los bosques según su tipo (primario o secundario) y estrato (muy húmedos y pluviales, húmedos, secos, manglares o bosques de palma).
Las áreas de conservación con niveles más altos en depósitos de carbono combinan el bosque primario del estrato muy húmedo y pluvial; esos depósitos poseen la mayor capacidad de almacenamiento de carbono por hectárea, según las estimaciones de densidades de carbono de la herramienta NRE/MRV (Minae, 2019b).
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Costa Rica: balance neto de emisiones por deforestación y remociones de carbono a/. 1987 y 2019
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a/ Los resultados comprenden información analizada en distintos períodos; por eso fue anualizada con el fin de comparar distintos momentos. Para visualizar gráficamente esta información, los resultados se agrupan espacialmente en hexágonos de igual tamaño (586,6 hectáreas). Sin embargo, los procesamientos se realizan mediante el análisis espacial píxel a píxel.
Fuente: Durán Monge y Aragón, 2021 con datos de Minae, 2019b.
Descripción
Entre 1987 y 1992, cuando se presentó la mayor cantidad de emisiones por causa de la deforestación en la serie, hubo una afectación generalizada en todo el país. Sin embargo, la mayor parte se concentró en el área de conservación Huetar Norte (32,1%), seguida de las áreas Central (14,1%) y Tortuguero (10,3%). En 2019 el patrón cambia: los niveles de emisiones son considerablemente menores y los valores altos se ubican principalmente en el Valle Central (25,7%). Las remociones (absorciones de CO2 derivadas de la sustitución de otros usos por bosques que dan lugar a un aumento del stock de carbono, esto es, la aparición de nuevos bosques secundarios) muestran una tendencia a la concentración en el período 1987- 1992, con valores altos en la península de Nicoya, cordilleras de Guanacaste y Tilarán, y la península de Osa. No obstante, en 2019 las remociones se encuentran dispersas en el país.
El resultado de estos patrones es la transformación de un balance dominado por las emisiones al inicio de la serie hacia un dominio de las remociones. En Durán Monge y Aragón (2021) se pueden consultar mapas exclusivos para las emisiones y para las remociones en este período.